Continuem amb la sèrie en col·laboració amb el Màster en Lied de l'ESMUC. Aquesta setmana l'alumne convidat és Al Dresden Ramos que ens presenta Abschied, d'Hugo Wolf; la i·lustració musical va a càrrec de Hermann Prey i Leonard Hokanson. Moltes gràcies, Al!
Erase un hombre a una nariz pegado,
erase una nariz superlativa,
erase una alquita medio viva,
erase un peje espada mal barbado;
(fragmento del poema "A un hombre de gran nariz”, de Francisco de Quevedo)
Según Susan Youens, autora y musicóloga, Hugo Wolf y Eduard Mörike serían una "pareja extraña". No se hubieran gustado si se hubieran conocido, como le admitió Wolf en su carta a Melanie Köchert después de leer una selección de cartas de Mörike diciendo: "Un cierto tono anticuado es demasiado prominente... sospecho que no nos hubiéramos llevado bien, después de todo ". Hugo compuso sus Mörike Lieder en 1888 mientras estaba en la casa de vacaciones de la familia Werners en Perchtoldsdorf. Ese año resultó ser el punto de inflexión en su carrera, desde su fracaso hasta su increíble productividad, y sus trabajos, incluido los Mörike Lieder, marcaron el comienzo de su período más maduro y productivo.
Después de terminar mi Máster en interpretación clásica (voz) y Máster en Ópera en el Conservatori del Liceu, me preguntaba qué haría después. Reflexionando y valorando lo bien preparado y amplio conocimiento que he adquirido en el campo en el que estoy formado, canto clásico, tuve conocimiento de que la ESMUC impartía el Máster en Estudios Avanzados en Lied, canción española y catalana "Victoria de los Ángeles". Decidí que era la gran respuesta a todas mis preguntas. Mi repertorio de lieder no era tan amplio en ese momento y tuve el anhelo de profundizar mi comprensión sobre este tipo de canción clásica y aprovechar que este curso lo ofrecía.
En las clases que tuvimos, tuve la oportunidad de "conocer" a otros compositores que ya conocía pero aún no me había atrevido a “aventurarme” en sus obras musicales y uno de ellos fue Hugo Wolf. Según una disertación que leí por Elizabeth Lee, las vidas de Mörike y Wolf pueden tener algunas similitudes como amor, desamor y luchas por encontrar sus propósitos en la vida, pero lo que más me interesó es su gusto contradictorio en la música. Mörike vivió en la época y las ideas de la Ilustración y se vio muy atraído por la música de Mozart, mientras que Wolf, por otra parte, se vio impulsado por los puntos de vista de la modernización y eso lo condujo a seguir a artistas como Wagner. Estas percepciones contradictorias creo que hacen de los Mörike Lieder de Wolf una colección muy apasionante.
Abschied es la última canción del libro de Mörike Lieder. Para mí es una de las canciones más interesantes de la colección teniendo en cuenta su tema y fondo. La canción trata de un hombre que comparte su experiencia con una persona extraña que acaba de llegar a su casa y se ofreció para ser su crítica. Comenzó a criticar su nariz por su enorme tamaño y luego continuó mencionando otras cosas poco agradables sobre él. El hombre hizo su mejor esfuerzo para controlar su temperamento y aún así ser respetuoso con la crítica, pero cuando finalmente decidió irse, el hombre alegremente le guió a la escalera y con tanta alegría, le dio una pequeña patada en la espalda y rodó abajo. ¡Eso fue su victoria y gran venganza!
La primera vez que escuché la canción, mi impresión fue que era realmente difícil. Primero, por todos los cromátismos y disonancias en la línea vocal y segundo, interpretarlo junto con el pianista. A esto se añade la complicidad de la pieza para representar a los personajes (el hombre y la crítica) en la voz del canto. Realmente dudaba si podría hacerlo ya que no estoy acostumbrado a este tipo de repertorio, pero me desafié a mí mismo.
El proceso de aprendizaje de la pieza fue realmente emocionante y divertido porque descubrí cosas nuevas que mi voz podía hacer y también la interiorización de los personajes. La parte del piano agregó color y me ayudó mucho a pintar el escenario de la obra. Me gustó mucho cuando la música cambia a un ritmo de vals (similar al vals vienés) donde se combina perfectamente con el texto y, sin duda, el estado de ánimo del personaje del hombre después de obtener su venganza a la crítica. Todo lo que puedo decir es que esta canción es la conclusión perfecta y el final de un recital.
Para finalizar, me gustaría decir que, de hecho, el Máster en Lied ha llenado un espacio en blanco en mi conocimiento musical. Me ha abierto la mente no solo a la formación sino también a los nuevos desafíos que han contribuido a mi crecimiento como artista clásico. Mi más profundo agradecimiento a todos mis profesores y compañeros de clase que han hecho todo este viaje divertido y memorable.
(Traducción del inglés de Floren Villarroya Miralles)
Unangeklopft ein Herr tritt Abends bei mir ein:
»Ich habe die Ehr', Ihr Rezensent zu sein!«
Sofort nimmt er das Licht in die Hand,
besieht lang meinen Schatten an der Wand,
rückt nah und fern,
»Nun, lieber junger Mann, sehn Sie doch
gefälligst mal Ihre Nas' so von der Seite an!
Sie geben zu, daß das ein Auswuchs is'.«
Das? Alle Wetter - gewiß! Ei Hasen!
ich dachte nicht, all' mein Lebtage nicht,
daß ich so eine Weltsnase führt' im Gesicht!
Der Mann sprach noch Verschiedenes hin und her,
ich weiß, auf meine Ehre, nicht mehr;
meinte vielleicht, ich sollt' ihm beichten.
Zuletzt stand er auf; ich tat ihm leuchten.
Wie wir nun an der Treppe sind,
da geb' ich ihm, ganz frohgesinnt,
einen kleinen Tritt, nur so von hinten aufs Gesäße mit –
alle Hagel! ward das ein Gerumpel,
ein Gepurzel, ein Gehumpel!
Dergleichen hab' ich nie gesehn,
all' mein Lebtage nicht gesehn
einen Menschen so rasch die Trepp' hinabgehn!
Por la noche entra un hombre en mi casa sin llamar:
“Tengo el honor de ser su crítico”
Inmediatamente toma la lámpara en la mano
Y mira atentamente mi sombra en la pared,
Va hacia delante y hacia atrás,
“Ahora, querido joven, tenga la bondad de mirar su nariz así de perfil.
Tendrá que reconocer que es una enorme protuberància”
Qué? Caramba! Claro! Dios mio!, Yo nunca pensé
En toda mi vida que paseaba una nariz tan grande por el mundo!
El hombre todavia habló de diferentes temas aquí y allí,
Juro por mi honor que no recuerdo de qué habló.
Pensó quizás que yo le confesaría algo...
Finalmente se levantó; yo le alumbré el camino.
Cuando llegamos a la escalera,
le di, con gran satisfacción
Desde detrás un patadita en las posaderes
Rayos y truenos! Que estruendo, que traspies, que voltereta!
Jamás havia visto algo parecido en toda mi vida,
Un hombre bajando tan rápidamente una escalera!
(traducció de Maria Dolors Aldea i Cabré)
Dresden Ramos es tenor y actualmente reside en Copenague, Dinamarca. Ha finalizado el Máster de Opera y el Máster en interpretación clásica y canto en el Conservatorio de el Liceo en Barcelona bajo la dirección de Eduard Gimenez.
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